Hace ya casi 200 años que grandes fabulistas como Andersen o Perrault escribieron algunos cuentos muy conocidos hoy en día, (El patito feo, La sirenita y La reina de las nieves, Pulgarcito, La Cenicienta, La bella durmiente, Caperucita Roja y El gato con botas). Unos años más tarde los hermanos Grimm adaptaron a la época muchos de esos relatos. Si analizamos estos cuentos nos empezamos a dar cuenta de toda la carga cultural que llevan encima. Pero después de todo, están pensados para transmitir un mensaje final, una cierta moraleja. Por ello creemos que la solución no debe ser eliminarlos, sino cambiar algunos aspectos para actualizarlos. Se trata de adaptar los cuentos del mismo modo que se hizo en su día por escritores reconocidos, los cuales nos enseñaron el camino a seguir a la hora de trabajar con textos que, con toda seguridad, nos sobrevivirán cientos de años.
Hace ya casi 200 años que grandes fabulistas como Andersen o Perrault escribieron algunos cuentos muy conocidos hoy en día, (El patito feo, La sirenita y La reina de las nieves, Pulgarcito, La Cenicienta, La bella durmiente, Caperucita Roja y El gato con botas). Unos años más tarde los hermanos Grimm adaptaron a la época muchos de esos relatos.
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